CANELONES DE CARNE
Esta es una de mis recetas preferidas, pero también una de las que más pereza me da hacer porque en casa no se conforman con un platito, no señor, ese día hay que ponerse ciegos de canelones. Y me encantan, pero los hago cada vez menos porque también es uno de los platos más "desagradecidos": llevan su tiempo (a mi casi toda la mañana) y luego desaparecen en cuestión de minutos. Así que los he ido reservando para los cumpleaños u ocasiones especiales, cuando cometo el error de preguntar qué quieren que les haga para comer, jajaja, con lo mona que estoy calladita.
Seguramente yo me complico la vida porque no me gustan los canelones precocidos, los probé una vez y no los he vuelto a comprar. Me he dado cuenta de que son los preferidos por la mayoría porque esta vez me ha costado tres supermercados encontrarlos, así que supongo que con el tiempo no me quedará más remedio que acostumbrarme.
Vamos con este clásico:
Ingredientes:
- 30 placas de canelones
- tomate frito (si es casero mejor)
- queso rallado (yo mezcla de 4 quesos)
Para el relleno
- 200 gr. de carne picada de ternera
- 200 gr. de carne picada de cerdo
- 1 cebolla
- 2 o 3 cucharadas de tomate frito
- aceite de oliva virgen extra
Para la bechamel
- aceite o mantequilla (yo prefiero aceite)
- 2 o 3 cucharadas de harina
- leche la que admita
- sal y nuez moscada
Elaboración:
1. En una sartén con un poco de aceite de oliva sofreímos la cebolla picada muy chiquitita hasta que esté blandita.
2. Añadimos la carne picada, sazonamos con sal y sofreímos hasta que pierda el aspecto de cruda.
3. Incorporamos dos o tres cucharadas de tomate frito, removemos y dejamos hacer unos minutos. Lo apartamos del fuego.
De esto no hay fotos: En una cazuela amplia hervimos las placas de canelones en abundante agua con sal y un chorrito de aceite. Es importante echar las placas de una en una, y dependiendo de cuántas hagamos mejor hacerlo por tandas para que no se rompan. Yo suelo hacer como mucho 15.
4. Ponemos un paño de cocina en la encimera y allí vamos dejando las placas según estén cocidas.
5. Rellenamos con una cucharada de carne y cerramos los canelones.
6. En la placa del horno se pone una cama de tomate frito y los canelones encima. Si pones el cierre hacia arriba es más difícil que se abran cuando los sirvas en los platos
7. En una sartén o cazuela antiadherente ponemos a calentar el aceite o la mantequilla y sofreímos la harina.
8. Vamos añadiendo leche caliente y removiendo con varillas para que quede sin grumos hasta que no admita más. No debe quedar muy espesa pero tampoco demasiado líquida.
9. Sazonamos con sal y una pizca de nuez moscada.
10. Cubrimos los canelones con la bechamel y espolvoreamos con queso rallado abundante.
11. Sólo nos queda gratinarlos unos minutos en el horno.
Recordad, hay que masticar 20 veces cada bocado... a ver si duran un poquito más.
¡Que tengáis un buen finde!