ESPAGUETIS CON TOMATE, BACON Y CEBOLLA CRUJIENTE
Ya se están acabando las navidades y sólo nos queda esperar a los Reyes. No me olvido que estamos en crisis y me voy a conformar con cualquier cosa porque como decía Groucho Marx, la felicidad está en las cosas pequeñas: un pequeño yate, una pequeña mansión, una pequeña fortuna...
Mis últimos recuerdos de los Reyes no son muy buenos por esa costumbre que tienen de llegar tan tarde que casi no daba tiempo de estrenar los juguetes. Yo debía tener seis años y me dejaron un Barriguitas (lo último en aquella época). Y como al día siguiente empezaba el cole me lo llevé sin saber que las monjas habían prohibido llevar los regalos de Reyes al colegio para que no hubiera comparaciones entre las niñas que habían tenido más regalos y las que no. Así que en cuanto la monja vio mi Barriguitas me lo confiscó y no lo recuperé hasta junio. Por supuesto todos esos meses pensé que en realidad Sor Mercedes me lo había quitado para jugar ella porque como era malísima, los Reyes no le habían dejado nada, jajaja.
Pues como hoy va de cosas pequeñas, vengo con unos humildes espaguetis, muy sencillos, fáciles y estupendos para estos días en que estamos hasta el moño de cocinar.
A ver si os gustan:
Ingredientes (3 personas):
- 150 gr. de bacon en tiras o taquitos
- cebolla frita crujiente (yo de Mercadona)
- 2 dientes de ajo
- 400 gr. de tomate troceado (lata mediana)
- sal y azúcar
- orégano
- aceite de oliva virgen extra
- 400 gr. de espaguetis
Elaboración:
1. Picamos los dientes de ajo, los sofreímos en aceite y en cuanto cojan un poco de color añadimos el tomate.
2. Sazonamos con sal, azúcar (yo le pongo la misma cantidad) y orégano.
3. Tapamos la sartén o cazuela y lo dejamos hacer a fuego lento unos 20-25 minutos. Si se queda demasiado seco añadimos un poco de agua.
4. En una sartén sin nada de aceite sofreímos el bacon hasta que esté bien dorado y lo añadimos al tomate que ya estará hecho.
6. Servimos la pasta con la salsa de tomate y bacon y para terminar ponemos en cada plato una cucharada de cebolla frita crujiente, que está buenísima y le va de maravilla.